miércoles, 21 de julio de 2010

HASTINGS: LA BATALLA QUE DECIDIÓ EL FUTURO DE INGLATERRA.

Hace días, os conté en que consistían los Torneos Medievales, pero todo tiene su comienzo, y la época de los caballeros llegó, en buena medida, gracias al rendimiento que dieron en una batalla ocurrida el 14 de Octubre del año 1066, una batalla de esas que podemos llamar épica: en la que el Rey Harold II defendía ni más ni menos que la corona de Inglaterra contra un pretendiente a la misma, su nombre: Guillermo el Conquistador, quien en esa batalla dejaría una de esas imágenes que sólo la Historia nos regala. Hablamos de la Batalla de Hastings.

Para comenzar esta historia, debemos remontarnos un poco en el tiempo, concretamente al año 430, en la llamada “época oscura de Inglaterra”, puesto que, ciertamente, es muy poco lo que se sabe de la Inglaterra posromana de los siglos V y VI, pero nos quedaremos con que fue invadida por varios pueblos germanos, el más importante, el sajón, con el que comenzaría una dinastía de reyes sajones que duraron hasta el año 1066.

En este año, reinaba en Inglaterra Eduardo el Confesor, quien murió sin dejar descendencia. Los sajones decidieron que el nuevo rey sería Harold Godwinson, Harold II, que era un general que había cosechado grandes victorias contra Gales y Escocia, y además, era cuñado del rey. Pero la transición no fue fácil, puesto que 2 nuevos candidatos al trono aparecieron más allá de las islas:

* El rey Harald de Noruega y Dinamarca reclamaba el trono puesto que le había brindado su apoyo al difunto Eduardo para que se mantuviera en el poder, ya que estaba en conflictos tanto con irlandeses y escoceses como con señores normandos del Norte de Francia.

* Y por otro lado, al duque Guillermo de Normandía, primo de Eduardo, y al que presuntamente, éste le había prometido el trono, ya que no podía heredarlo directamente al ser bastardo


(En la imagen, retrato de Guillermo I; Fuente: "www.voyagesphotosmanu.com")

Ante esto, Harold movilizó a su población y convocó a la milicia, los fyrdmen, que junto con su guardia personal, los huescarles, formaban los 2 cuerpos de ejército que debía de frenar los intentos de conquista de los 2 pretendientes al trono. Los huescarles eran tropas pesadas, acorazadas, de élite, primero lanzaban sus franciscas (hachas arrojadizas) y después usaban sus pesadas hachas de combate y sus escudos ovoides. Realmente eran unas tropas formidables.


(En la imagen, dibujo de una formación de huescarles; Fuente: "mahan.wonkwang.ac.kr")

Este ejército se apostó en Londres, puesto que se esperaba una invasión de Guillermo a través del Canal de la Mancha, pero ocurrió que el tiempo de movilización de la milicia (2 meses), se agotó sin señales de la posible invasión. Aprovechando la situación, Harald desembarcó al Norte, comandando un ejército de unos 5000 hombres. Ante esto, Harold marchó a su encuentro al mando de sus huescarles y de los fyrdmen que aún estaban a su lado. Cuentan las crónicas que cuando Harold se enteró de la invasión, dijo tranquilamente, “le daré al Rey Noruego 2 metros de suelo inglés, los justos para su tumba”.

Llegados a esto, Harold marcha con su ejército hacia York, y el 8 de septiembre, divisa el campamento vikingo cerca del Puente Stamford (Stamford Bridge, que algunos conoceréis por ser el nombre del estadio del Chelsea) y decide atacar aprovechando la situación. Dicen que un berserker que dejaba pequeño al propio Harald, que medía más de 2 metros; armado con un hacha y desprovisto de armadura, contuvo los intentos de los soldados ingleses de cruzar el puente durante más de una hora, dando así tiempo a sus compañeros a organizarse defensivamente. Finalmente, el vikingo fue abatido y los ejércitos chocaron, pero la batalla se desniveló a favor de los sajones, además, el Rey noruego fue abatido por una flecha muriendo en batalla.


(En la imagen, cuadro que representa la batalla de Stamford Bridge; Fuente: "wikipedia")

Una semana más tarde, cuando Harold aún se encontraba en York recuperándose de la batalla, recibe la noticia de que Guillermo había desembarcado en Pevensey, cerca de Londres, con unos 6000 infantes y caballeros normandos, aunque también había arqueros e incluso ballesteros, era lo que podía llamarse un ejército muy moderno en comparación al sajón, compuesto básicamente por infantería. Pevensey no era un lugar adecuado como base, pero ante la falta de enemigos, Guillermo pudo desplazarse hasta Hastings, donde incluso construyó un fuerte de madera.

De nuevo tocó marchar al ejército de Harold y completaron las 500 millas que separan York y Londres en 9 días; en la capital permanecería 5 días más, donde sus soldados descansarían y trataría de reclutar las máximas unidades posibles, pero tuvo un error, que fue no conovocar a la Milicia de Londres.

Llegamos así al día 13 de octubre, día que Harold despliega su ejército en la colina de Senlac, al sur de Londres, unos 11 Km tierra adentro; a priori era una zona ideal de defender: un frente de unos 500 metros, con pantanos a un lado y el río Asten al otro.

Tras recibir estas noticias, Guillermo emprende la marcha hacia el norte al amanecer del día 14. Los ejércitos se encontraban uno frente a otro antes de las 9 de la mañana de ese mismo día. Ante la formación sajona, Guillermo dispuso a sus tropas en 3 grupos: los flancos estaban al mando de los Duques de Bretaña y de Boloña, con bretones y, mercenarios y caballeros flamencos respectivamente. Mientras que el centro, las mejores tropas y la caballería pesada, la “conroi”, estaban bajo su mando.


(En la imagen, foto de una representación de la caballería que usó Guillermo; Fuente: "www.greydragon.org")

Pasadas las 9, sonaron las trompetas normandas, a esta señal los arqueros se adelantaron y comenzaron a disparar, los longbow empezarían ha hacer estragos en las filas sajonas, arcos finos, que en manos de expertos, alcanzaban casi los 200 metros en cada disparo. Como los sajones apenas disponían de arqueros, los normandos pudieron disparar a placer hasta vaciar sus carcaj.

Tras esto, comenzó la lucha cuerpo a cuerpo, pero debido a la posición defensiva sajona en alto, los soldados y caballeros normandos llegaban cansados al choque, y si a esto unimos que los huescarles, situados en el centro y bajo el mando de Harold, hacían estragos, el resultado fue que las primeras tentativas normandas fueron en vano y tuvieron muchas bajas, tanto que incluso el propio Guillermo falló en una serie de cargas que hizo con la caballería pesada.

El flanco bretón entonces pareció vacilar y batirse en retirada, hecho que hizo que la milicia sajona, que eran soldados irregulares, rompieran la línea defensiva para perseguirlos; pero los bretones recompusieron filas y lograron acabar con ellos. Viendo esto, Guillermo decidió de nuevo cargar contra los defensores, pero fue derribado de su caballo.

La vacilación y el miedo llegó a las filas normandas que hicieron amago de romperse, hecho que hizo que los sajones rompieran de nuevo la línea con la idea de dar caza al invasor. Entonces ocurrió la imagen que antes os comentaba, esa imagen para la historia: Guillermo montó de nuevo su caballó, alzó la visera de su casco y de pie sobre los estribos, para mostrar que aún vivía, recompuso sus filas, arengando a sus hombres porque la lucha aún no había acabado. Mandó disparar a sus arqueros las últimas flechas, y aprovechando la desorganización sajona y que debían de subir sus escudos para cubrirse de las flechas, lanzó un último ataque frontal, ataque en el cual un caballero mataría al propio Harold y marcaría de manera definitiva el final de la batalla.


(En la imagen, recreación de una "carga" de caballería; Fuente: "www.greydragon.org")

El día de Navidad de ese mismo año, en la Abadía de Westminster, Guillermo sería coronado Rey de Inglaterra; con esto, el sistema feudal llegaría a Inglaterra, supondría la llegada de la caballería pesada a los campos de batalla europeos, pero también sirvió para comprobar que una infantería bien preparada como la que formaban los huescarles, también era formidable, y que el arco de tiro largo, también sería parte importante de los ejércitos ingleses en los años venideros.